Este año “ha sido un muy buen año para todos los que estamos en la actividad”, resaltó Perdomo, y explicó que, aunque los vendedores de propiedades habían tenido altas expectativas de precios en 2023, un año marcado por la sequía y otras dificultades económicas, este 2024 las expectativas se flexibilizaron y permitió que más clientes pudieran concretar la compra de viviendas, terrenos y otros tipos de propiedades.
El empresario también subrayó que este comportamiento ha generado un movimiento económico favorable, ya que el sector inmobiliario está estrechamente vinculado a actividades como la construcción, el trabajo de los profesionales y la mejora de propiedades. “Cuando hay dinamismo en el mercado inmobiliario, eso después derrama en toda la sociedad, generando un movimiento económico que es muy bueno”, celebró Perdomo.