La iniciativa es impulsada por el Ing.Agr. Esteban Arosteguy -quién asesora a diversos productores particularmente del rubro quesero artesanal- tras observar las dificultades que los mismos afrontan en épocas de déficit hídrico para alimentar a sus animales.
“En la sequía pasada tuvimos alguna experiencia con una pequeña productora del norte del departamento, que prácticamente atravesó la sequía con la producción de forraje hidropónico sin tener que salir a conseguirlo fuera del predio. Nos quedó esa idea, seguimos investigando el tema y encontramos una empresa en China, Lyine, que construye contenedores adaptados para esta producción. Es algo innovador que creemos que puede llegar a ser una gran solución para los problemas de falta de agua, porque nos permite empezar a producir en condiciones controladas que a veces es el gran problema que tenemos en la producción agropecuaria por las variables climáticas por las que pasamos de una helada a la lluvia abundante y después a la sequía. Con este sistema podemos obtener siempre la misma producción de forraje todo el año, independientemente de lo que esté pasando afuera y eso nos va a dar determinada estabilidad a lo que es la producción. Aparte, el forraje hidropónico tiene determinadas condiciones de energía, proteína y calidad que hace que sea por demás apetecible para el ganado lechero”; explicó el profesional en diálogo con “PROCAMPO”.
Los contenedores para producción hidropónica de forraje que se gestionan cuentan con un sistema basado en luz LED con control de temperatura, humedad, temperatura del agua y riego presurizado. Todo lo cual se configura mediante una pantalla táctil de fácil manejo para los productores. “Esto levanta varias de las problemáticas que tuvimos con la producción de forraje hidropónico en invernáculo, ya que todo lo que tiene que ver con el control de temperatura y humedad, al ser en condiciones totalmente controladas dentro de un contenedor, no las sufrimos. Antes sufríamos con las temperaturas elevadas, que superaban a veces los 40°C afuera del invernáculo, que además de afectar la producción de forraje en la época de sequía, generaba hongos. Estos contenedores vienen con ozono, lo que ayuda al control de los hongos”; acotó Arosteguy sobre las ventajas de este sistema.
El primer contenedor partirá desde tierras chinas el 1° de abril rumbo a San José para ser instalado en el Establecimiento “El Casco” de Carlos Verde, productor familiar, quesero artesanal de la zona de Laurel -con entre 50-60 vacas en ordeñe- que se sumó a esta iniciativa luego de que prácticamente perdiera el 50% de su superficie productiva, ya que un campo que arrendaba a tales efectos será vendido por su dueño. El sistema a implementar le va a permitir alimentar unas 50 vacas con una producción de 500 kilos de forraje por día, llegándose a dar hasta 10 kilos por vaca.
Cada contenedor tiene un valor aproximado de unos US$ 30 mil y su adquisición pudo lograrse mediante la financiación del Programa “Oportunidades circulares” de la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE) que aprobó el proyecto. “Estamos con mucha alegría de innovar, de ofrecer una alternativa tecnológica por demás valiosa para todo ese momento difícil que atraviesan a los productores. Esto les va a generar un abaratamiento -sin lugar a dudas- de los costos, sobre todo de los de dejar de producir, que es de las grandes cosas que le pasan a los productores en la sequía. Creemos que con este sistema podemos llegar a solucionar gran parte de la problemática, sobre todo de los pequeños productores que muchas veces son los más desamparados y los que menos capital a veces tiene para sobrellevar las situaciones de sequía”; concluyó Arosteguy.