El obispo de San José, monseñor Fabián Antúnez, informó que el proyecto prevé la recuperación de la fachada principal y de la parte superior de la cúpula, donde se realizarán tareas de cerramiento e impermeabilización para detener las filtraciones de agua. También se intervendrán otros sectores de los techos, que presentan problemas similares. Para financiar esta primera etapa, ya se han conseguido aportes propios, donaciones privadas y se avanza en un convenio con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), iniciado durante el gobierno anterior. Además, se encuentran habilitadas dos cuentas bancarias —una en dólares y otra en pesos uruguayos— para canalizar los aportes de la comunidad. En paralelo, se están realizando trabajos de pintura y refacción en la capilla interna del templo, y se prevé renovar el sistema de amplificación de sonido, con el objetivo de mejorar la audición durante las celebraciones religiosas.
Monseñor Antúnez destacó la necesidad de involucrar a toda la sociedad en este esfuerzo por restaurar la Catedral, uno de los principales edificios patrimoniales de la ciudad. “Esta iglesia se construyó con el aporte de todos en su momento, y ahora necesitamos de todos nuevamente”, afirmó. También mencionó que se están buscando nuevas fuentes de financiamiento, incluyendo aportes del sector empresarial y contactos en el extranjero. La restauración de la Catedral supone un desafío financiero importante para la Diócesis, por lo que se ha optado por dividir el proyecto en etapas. El objetivo es avanzar de forma progresiva y sostenible, mostrando resultados y alentando nuevas colaboraciones a medida que se desarrollen los trabajos.