Su fallecimiento se produjo apenas un día después de su última aparición pública, durante la bendición Urbi et Orbi del Domingo de Resurrección. Desde una silla de ruedas y con evidente fragilidad, pronunció su último mensaje a los fieles con un breve saludo.
Francisco se encontraba convaleciente tras una neumonía que lo había llevado a ser internado en marzo, aunque posteriormente había retomado parte de su agenda. En sus últimos días, participó de celebraciones litúrgicas, visitó una prisión de Roma y recibió a autoridades internacionales, entre ellas al vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance.
Jorge Mario Bergoglio, nacido en Buenos Aires, fue el primer Papa latinoamericano y el primero no europeo en más de mil años. Su papado marcó un cambio de estilo en el Vaticano, con un enfoque pastoral, austero y cercano a los más desfavorecidos.
Tras su muerte, se inicia el interregno papal, el período entre pontificados. Se celebrarán nueve días de luto, conocidos como los Novendiales, y su cuerpo será expuesto en la Basílica de San Pedro, donde se espera una gran concurrencia de fieles. Luego, los cardenales menores de 80 años se reunirán en cónclave para elegir al nuevo Papa.
La Conferencia Episcopal del Uruguay emitió un comunicado en el que expresa su conmoción ante el fallecimiento del Papa Francisco y llama a la comunidad católica a unirse en oración por su eterno descanso.
"Su partida a la Casa del Padre conmueve en este día a toda la Iglesia", señalaron los obispos, quienes invitan a ofrecer oraciones por el Pontífice en todas las misas que se celebren a partir de este lunes.
Además, anunciaron que el próximo miércoles 23 de abril, día del onomástico de Jorge Bergoglio, se celebrará una misa de difuntos en su memoria a las 17 horas en la Catedral Metropolitana de Montevideo.
Los obispos exhortaron a que ese mismo día se realicen misas en todas las parroquias del país, en los horarios que permitan la mayor participación de fieles.