Antúnez destacó que el Papa Francisco supo estar siempre del lado de los más pobres y necesitados, y que trabajó incansablemente para que todos se sintieran parte de la Iglesia, sin importar su historia, condición o lugar de origen. “Su forma de vivir el Evangelio, cercana y comprometida, nos marcó profundamente”, afirmó.

También valoró como un gesto simbólico su última aparición pública durante la celebración de Pascua, pocos días antes de su fallecimiento. “Fue como una despedida. Un momento sereno, que hoy adquiere un significado aún más profundo”, reflexionó.

En relación con la elección del nuevo Papa, Antúnez explicó que no existe una fecha determinada para el inicio del cónclave, ya que el proceso depende de las reuniones entre los cardenales en el Vaticano. Confirmó que el cardenal uruguayo Daniel Sturla participará del proceso y, aunque reconoció que tiene posibilidades, fue prudente al respecto: “Es difícil saber qué pasará. A veces el Espíritu Santo sorprende”, comentó.

Finalmente, el obispo expresó su deseo de que el próximo Papa continúe el camino trazado por Francisco. “Ojalá tenga un corazón parecido. Que sea alguien cercano a la gente, compasivo, abierto, que haga sentir a todos como en casa”, concluyó.